viernes, 13 de septiembre de 2013

Alimentación en El Renacimiento Primera Parte



  1. Es el periodo histórico mas importante del arte de la mesa y la cocina , nace los grandes aparatos para confeccionar platos de banquetes , durante estos se desarrollaban números artísticos  .Un ejercito de sirvientes y artesanos de la gastronomía estaban a la orden de un Chef
  2. Surge un renacer cultural, comer es sinónimo de arte enciende los sentidos, sublima el poder y la comida es una religión para los poderoso la diferenciación social a partir de este periodo es tajante.
  3. La Italia Renacentista es cuna de famosos Chef se visualiza una alta cocina refinada y de prestigio
  4. Durante el siglo XVI se publican recetario de cocina como manuales de comportamiento durante los eventos culinarios. Surge una gran división del trabajo en base a directores de Comidas, Bebidas Trinchantes etc , detrás de estos personajes hay un ejercito de sirvientes que se ocupan de todos los detalles .
  5. Los nuevos platos hacen que el anfitrión demuestre que es magno en el arte de agasajar (Olla Podrida etc)
  6. Conocían como utilizar  algunos derivados de la leche (mantequilla-crema de leche-)
  7. Se adornaba la mesa con los mejores hilados de la época .
  8. El personal que rodeaba al Chef debía ser educado en la especialidad del periodo , si bien el cocinero era de origen humilde , cuando confeccionaba nuevos platos priorizaba los ingredientes mas caros .
  9. A pesar de todo el esplendor descrito el Chef no tenia tanta creatividad -
  10. Las especies se empleaban para conservar los alimentos (carnes y frutas) pero podían ocultar malos olores aun así el alimento era presentado en los banquetes .

jueves, 27 de junio de 2013

Dime qué comes y te diré quién eres


Ciencia|Miércoles, 05 de Septiembre de 2007

PATRICIA AGUIRRE, ANTROPOLOGA
Dime qué comes y te diré quién eres
La antropología alimentaria analiza la alimentación como un proceso sociocultural, advirtiendo en ella la división clasista de la sociedad, la construcción social del gusto y la reproducción de sus representaciones.
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Por Federico Kukso
Las comidas son ricas en varios aspectos: por sus sabores, por sus tradiciones innatas, por sus nutrientes que sacian el hambre y también por las múltiples puntas de investigación que dispara. Es que la comida y su práctica, la alimentación, desde hace bastante tiempo cayeron dentro del campo de acción de la antropología que las deconstruye y analiza hasta el último detalle para ver en ellas a la sociedad cotidianamente, con su imaginario, representaciones, posibilidades de acceso y gusto en acción. “La alimentación es una práctica totalmente oscura porque es algo que hacemos todos los días, parece natural y es a través de ella que una sociedad se reproduce física, social y simbólicamente”, advierte la antropóloga Patricia Aguirre, integrante del Departamento de Nutrición del Ministerio de Salud de la Nación e investigadora del Instituto de Altos Estudios Sociales de la Universidad Nacional de San Martín (Idaes/Unsam).
–¿Qué es la antropología alimentaria?
–Es el abordaje de la alimentación como hecho social o, si se quiere, el análisis social de la alimentación. Nosotros no le vamos a recomendar a nadie cuál es la dieta adecuada.
–Eso lo recomiendan los nutricionistas.
–Por supuesto. Los antropólogos de la alimentación estudiamos qué es lo que hace que del infinito arco de comestibles para un omnívoro como somos nosotros, en diferentes culturas, en diferentes tiempos, y en diferentes geografías, se recorte un pequeño abanico al que llama “comida”. Y que eso se produzca, se distribuya y se legitime de determinada manera.
–O sea, tomar la alimentación como una práctica más de la cultura.
–Una práctica fundamental. Porque la alimentación es producto de relaciones sociales y a la vez produce relaciones sociales. Deviene de una forma de producción, de una forma de relacionarte con el ecosistema, de una tecnología, de una economía, de una estructura de derechos que legitima quién puede comer qué. Los diferentes géneros comen de diferente manera. No hay nada que diga que las mujeres deban comer pollo y los hombres, bife. Pero en el imaginario social se construyen dietas femeninas y dietas masculinas, alimentos propios de niños, de adultos y de ancianos. Nosotros estudiamos ese juego de los alimentos en la sociedad que obviamente es producto de relaciones sociales que lo preceden y contribuye a cristalizar algunas y dinamizar otras.
–Además, lo que se come cambia en el tiempo.
–Sí. En nuestro tiempo llamamos “dieta sana” a una dieta rica en frutas y verduras y hace cincuenta años llamábamos dieta sana a una dieta llena de hidratos de carbono y proteínas animales. La alimentación es situada. Hace unos 20 años los antropólogos empezamos a insistir con la “dieta paleolítica” sobre la cual se había fundado nuestro cuerpo como Homo Sapiens. Era una dieta rica en fibras, baja en sodio, sin lácteos, sin azúcares refinados. Hasta que hace poco ciertos médicos desde varios libros la volvieron a recomendar. ¡Habían entendido mal! La dieta paleolítica es un modelo, no existe como tal. En los miles de años, en la diversidad de ecosistemas que vivieron los cazadores-recolectores del Paleolítico, hubo muchos tipos de dietas. Lo de “dieta paleolítica” es un modelo construido para comprender mejor la situación actual. Casi el 70 por ciento de lo que comemos no existía en aquel momento.
–¿Y hay un modelo dietario actual?
–No, no hay uno solo. Por más que en este momento la alimentación urbana e industrial está verdaderamente globalizada en una cocina mundial donde encontrás un núcleo duro de productos industriales como tomates conservados, cubos de caldo deshidratados, dulces, aceites, desde Sudán a Churchill en el Círculo Polar Artico de Canadá.
–Pero sigue habiendo costumbres alimentarias locales.
–Por supuesto. En esos horizontes locales y globales conviven el patrimonio gastronómico que estructura la vida como si fuera un lenguaje y la alimentación industrial que desestacionaliza y deslocaliza las dietas. Un día se puede comer empanadas locales, al otro empanadas industriales y al tercero empanadas gourmet.
–El antropólogo Claude Fischler decía que no sólo comemos nutrientes sino que también comemos sentidos. Usted coincide con esa visión, ¿no?
–Claro. Eso quiere decir que la alimentación no se agota en estudiar los nutrientes. Si sólo nos alimentásemos con nutrientes todos los humanos comeríamos alimento balanceado.
–Como la comida para los astronautas.
–La comida para los astronautas sigue las pautas culturales de los astronautas. Comen pollo deshidratado o helado; llevan la comida que están acostumbrados a comer.
–O sea, la alimentación no es sólo una cuestión de nutrientes.
–Tiene sentido para una persona comer pollo a la portuguesa, entra en el juego de los intercambios sociales. Cuando un hombre quiere seducir a una señorita se usa el evento alimentario, el tipo de productos que se invita a comer, la forma de la preparación, el ambiente... Eso dice algo. Es distinto invitar a una mujer a tomar un café que invitarla a cenar a un restaurante. El evento alimentario está marcado y marca la situación social.
–Es decir, la comida tiene usos múltiples.
–La comida sirve para seducir, para marcar el estatus de una persona, sirve como eje de relaciones sociales: los eventos políticos se marcan con un tipo de alimentación concreta. El 25 de mayo se desayuna con chocolate con churros. Si sos de la oposición hacés locro. La comida marca las diferentes festividades. La gente en un velorio se sirve café y no champán. La comida sirve para generar seguridad.
–¿Por ejemplo?
–Durante mucho tiempo trabajé en el Programa Materno Infantil y todas las mujeres bajo la línea de pobreza decían lo mismo: “Cuando no tengo leche me desespero”. Leche para la mamá implica seguridad. Y curiosamente, durante la hiperinflación en 1989 muchas personas de ingresos medios aumentaron de peso. En fin, la comida sirve también para demostrar poder económico, para marcar el género y edad de las personas. Con la comida se demuestra también la pertenencia a un grupo.
–Es decir, como se dice, somos lo que comemos.
–Eso lo dijeron los alemanes. Los franceses son más sutiles y prefieren decir “dime qué comes y te diré quién eres”. Es el hecho social de la comida. Hay una identidad alimentaria. En los migrantes es lo último que se pierde. Lo primero que hacen al llegar a un país es cambiar de ropa. Pero la comida no se toca, dentro de lo posible y con algunos cambios. Una manera de ver si un grupo se ha integrado a una sociedad no es ver si come lo que come la sociedad receptora, sino ver si la sociedad receptora ha adoptado algún alimento de este grupo. El caso del bagel o de la dona en Nueva York es clarísimo. Su origen es de Europa Central.
–Hay ciertos alimentos que conservan en su nombre su lugar de origen: la hamburguesa, la milanesa...
–Dentro de lo comestible todas las cultura recortan un abanico muy limitado. En ciertas regiones se crían y comen perros. Nosotros criamos perros como mascotas y las mascotas no son comida; tienen estatus de persona.
–Se les pone nombre...
–Eso tiene que ver con situaciones ecológicas, demográficas, productivas, tecnológicas, económicas y simbólicas. Las pautas alimentarias, situadas geográfica e históricamente, no son absolutamente arbitrarias ni “locas” ni reductibles a la racionalidad extrema. La alimentación humana es un hecho complejo, un hecho social total: porque entrando por la alimentación termino estudiando a la sociedad en su conjunto. Para estudiar por qué la gente come como come tengo que estudiar cómo vive.
–No es un campo autónomo.
–Para nada. Está enraizada en las prácticas cotidianas, con el hacer. No hay nada natural en la alimentación humana. Las preferencias o interdicciones alimentarias son construcciones sociales. Las sociedades construyen su gusto. Difícilmente se coma algo que no se produzca con cierta ventaja comparativa. Los argentinos comemos tanta carne por un fenómeno de estructura, una ventaja ecológica que se convirtió en ventaja económica: cuando vinieron los españoles acá había una gigantesca estepa herbácea con muy poca densidad de población y dejaron libres herbívoros mansos que no tenían competencia y se reprodujeron ad infinitum. Pero además la alimentación tiene una dimensión simbólica y subjetiva.
–¿Cómo es eso?
–La alimentación es parte de la construcción del sujeto. Uno tiene sus preferencias dentro de las preferencias del grupo. Tiene que ver con las experiencias propias, con la historia individual. Es un toque de distinción, pero no es una elección libre e infinita. El gusto que parece algo tan individual es una construcción social. Hay un gusto pobre, un gusto medio y un gusto de sectores de ingresos altos.
–¿Pero por qué los seres humanos no comemos seres humanos?
–No comemos seres humanos aquí, ahora, en esta cultura, porque es un tabú. En otras culturas sí se practicó el canibalismo, funerario o guerrero; se valorizaba tanto la fuerza del otro que una manera de internalizarlo era comerlo. No eran nutrientes, era una comida de prestigio.
–Volviendo a los distintos consumos. Usted resaltaba la cuestión del género.
–Sí, por ejemplo, las mujeres son las que más inciden en la alimentación del hogar. Si vos querés aumentar rápido la calidad de la alimentación de un lugar, dales trabajo a las mujeres. El género también decide en la elección de los alimentos. Es curioso: los hombres suelen comer puré de papa y las mujeres puré de zapallo. El asado es la comida masculina. Además, dentro del sesgo carnívoro rioplatense, muchos entienden por comida simplemente carne con algo. Desde el punto de vista de las representaciones si no hay carne bovina no hay comida. La gente sesga sus elecciones alimentarias de acuerdo con lo que piense de su cuerpo, el concepto ideal y clasista de cuerpo, y el efecto de la alimentación en él. Los ideales difieren: los sectores de ingresos bajos quieren un cuerpo fuerte; los medios, un cuerpo lindo y los altos; un cuerpo, sano. Al fin y al cabo la alimentación es doble: uno se alimenta con nutrientes y con representaciones.



sábado, 25 de mayo de 2013

Recetas Tradicionales 2


Región  Noroeste 

Humita en Chala

Ingredientes: choclos 3 kilos – azúcar, 1 cucharada – Ají molido ½ cucharada – Aceite, 3 cucharadas – Chalas cantidad necesaria – Queso Fresco, 200 gramos – Anís en grano, una pizca – Sal y pimienta a gusto.
Procedimiento: Rallar los choclos y molerlos en el mortero hasta reducirlos a una pasta. Poner el aceite en una cacerola, calentarlo y agregas la pasta de choclos, el azúcar, el ají molido, sal pimienta y el anís. Saltear todo revolviendo bien, hasta que se forme una pasta seca. Retirar y dejar enfriar. Lavar unas hojas de chala grandes y unirlas de a dos. Poner en el centro una porción de pasta y encima un trozo de queso. Doblar las chalas formando un paquetito y atarlo como de costumbre. Poner en el fondo de una olla grande algunos marlos formando una base para apoyar las humitas. Agregar agua hasta la altura de los marlos, para que las humitas se cocinen sólo con el vapor. Colocar las humitas sobre la base de marlos y tapar la olla.
Llevarla al fuego 1 hora, hirviéndolas lentamente.

Guaschalocro

Ingredientes: 10 choclos frescos – ½ kg. De zapallo criollo – ½ kg. De queperí – 2 batatas – 2 cucharadas de grasa pella – 2 cebollas en cabeza – 2 cebollas de verdeo – 2 lts. De agua – condimentos, sal, comino, ají, pimentón.
Procedimiento: en una cacerola grande poner dos cucharadas de grasa pella fría y dejar calentar. Agregar las cebollas en cabeza, finamente picada, dejar dorar. Agregar una cucharada de sal, comino, ají y pimentón. Remover rápidamente evitando que se queme y poner dos litros de agua hirviendo.  Poner el choclo (cortado de la mazorca con cuchillo) y ¼ de zapallo en trozos. Dejar hervir una hora, agregar el queperí en trozos chicos (que no se requiera cuchillo al comer). Cocinar ½ hora más, agregar las dos batatas y el resto del zapallo en trozos y cocinar ½ hora, removiendo continuamente. Si se desea se puede agregar panceta ahumada en trozos, juntamente con la carne. Al servir, en cada plato se coloca cebolla de verdeo finamente picada.

Anchi (postre):
Esta preparación se encuentra tanto en el NEA como en el NOA. En el NOA en general usan naranjas ácidas y en el NEA usan naranjas a veces mezcladas con jugo de limón. De todas maneras lo he encontrado más en libros de recetas del NEA que del NOA.
Ingredientes: 500 gr. Harina de maíz – 200 gr. De azúcar – 150 cc. De jugo de naranjas o limones – canela en rama – 500 gr. De orejones o 80 gr. De pasas de uvas o 150 gr. De dulce de membrillo.
Procedimiento: poner a hervir 1,5 litros de agua con el jugo de naranjas, el azúcar, los orejones y el jugo de naranjas. Cuando hierva incorporar la harina de maíz en forma de lluvia, cocinar revolviendo con cuchara de madera hasta que este bien cocida la harina. Como no debe quedar muy espeso a lo mejor es necesario agregar un poco de agua durante la cocción.

Recetas Tradicionales 1



AMBITO CUYANO


Carbonada en Zapallo (6 porciones)
Ingredientes: 1 zapallo amarillo de 5 kg. Aprox. – 6 choclos americanos (dulces), pueden ser congelados – 1 cebolla grande – tomates maduros y grandes – ½ kg. De nalga limpia – 1 cucharada de azúcar granulada- ½ taza de buen arroz – 3 pimientos morrones rojos – 1 vaso de vino blanco seco – aceite de maíz – 300 cc. De leche.
Procedimiento: lavar el zapallo, cortarle la parte superior con un serrucho y ahuecarlo, sacando las semillas.
Método 1:  untar el hueco con manteca, espolvorearlo con azúcar y rociarlo con leche, practicando algunos cortes en la carne del zapallo para que embeba bien. Tapar el zapallo con la parte que hemos cortado y cocinar a horno moderado durante una media hora aproximadamente. Una vez asado el zapallo se procede como en el método 2. Al terminar la cocción de los demás elementos, se rellena con ellos el zapallo y se sirve colocando en cada plato un trozo de zapallo asado que desprenderemos de la cascara.
Método 2: Con el método anterior podemos tener el problema que el zapallo tienda a ablandarse demasiado, así que personalmente prefiero ahuecar bien el zapallo quitando toda su carne. Se corta esta pulpa en trozos y se cocina en forma separada, evitando que se deshaga. Se agrega a la carbonada al final.
Después usaremos la cascara, previamente calentada, como recipiente para servirla.
Cortar los choclos en trozos pequeños y cocinarlos también por separado hasta que esten tiernos. Saltear el arroz con el aceite.
En cacerola aparte dorar la cebolla y los morrones finamente picados en el resto del aceite. Agregar después la carne cortada en cubitos. Apenas se dora la carne, incorporar los tomates pelados, sin semilla y cortados en concassé, y el vino blanco. Salpimentar y aderezar con un poco de azúcar, dejar cocinar a fuego lento tapado durante 20 minutos, en ese momento incorporar el arroz dorado y seguir la cocción hasta que el arroz este a punto (si es necesario, agregar un poco de caldo de ave durante la cocción). Después se incorporan los choclos y el zapallo cocinado.
Llevar el zapallo al horno durante unos 10 minutos y servir la carbonada dentro del mismo.

Gaznates

Ingredientes:6 yemas – 1 cucharada de anís en grano – ½ cda. De grasa pella derretida – ½ cda. De coñac – ¼ kg. De harina – grasa para freír – dulce para relleno.
Procedimiento: batir las yemas hasta que queden cremosas o sea casi blancas, añadir el anís, coñac y la harina necesaria para levantar una masa blanda. Se trabaja hasta que se  desprenda de las manos y de la mesa, mientras se soba, se agrega poco a poco la grasa derretida.
Se estira finita, se cortan cuadraros de 6 cm. Y se une humedeciendo las orillas de las puntas opuestas. Se fríe en grasa caliente. Se dejan enfriar y se rellenan con dulce de leche. Si se desea se confita con almíbar a punto alto.
También se puede hacer la masa sin huevo, trabajando con la misma forma. La porción es ½ kilo de harina y 80 grs. De grasa pella.

Recetas Tradicionales



Surubi al Paquete

Ingredientes: 6 trozos de surubí fileteados de 200 grs. Aprox. – 1 cebolla cortada en juliana fina -  1 morrón colorado picado fino – 200 grs. De coulis de tomates espeso – ají picante molido – orégano – pimentón  - mostaza de dijón – vino blanco -  aceite de oliva o maíz – sal y pimienta negra recién molida.
Procedimiento: saltear en bastante aceite de oliva o maíz primero la cebolla hasta que comience a blanquearse, incorporar a continuación el morrón picado, y cuando éste comience a ablandarse mojar con el vino blanco, reducir a la mitad y después condimentar con orégano, pimentón, un poco de ají molido, sal y pimienta negra recién molida. A continuación agregar el coulis de tomates, 2 cucharadas de mostaza de dijón y un poco más de aceite de oliva de maíz. Cocinar hasta que la cebolla y el morrón estén bien blando. Dejar enfriar antes de usar.

Colocar cada trozo de surubí salpimentado sobre un rectángulo de papel aluminio que pueda envolver bien el pescado, poner un poco de la preparación  anterior sobre cada filete de pescado. Hacer los paquetes envolviendo cada trozo de pescado dejando la abertura hacia arriba, antes de cerrar el paquete, mojar con un poco de vino blanco y de aceite de oliva de maíz.

Cocinar al horno durante unos 10 a 15 minutos, dependiendo esto del grosor del filete.
Montaje del plato: servir acompañado con papas en rodajas hervidas y flores de brócoli.

Chipa

Ingredientes: 1 kg. De almidón de mandioca – 500 grs. De queso holanda – 500 grs. De queso parmesano – 3 huevos – 200 grs. De manteca – 240 cc. De leche – 1 cucharada de sal gruesa – 1 limón exprimido – 2 naranjas exprimidas.
Procedimiento: diluir la sal en la leche y calentarla. Hacer la masa formando una corona con el almidón y colocando en el centro los quesos rallados, la manteca en trozos, los huevos previamente batidos, el jugo de limón, el de naranjas y la leche caliente. Trabajar con las manos hasta obtener una consistencia medianamente homogénea. Dejar descansar una hora y media. Hacer los bollitos del tamaño que se deseen y cocinar en horno caliente (220 grados) durante aprox. 20 minutos.
Hay que tener cuidado de que no se doren mucho porque la harina de mandioca toma gusto amargo.

Alfajores de Mandioca (postre)
Ingredientes: 1 kg. De almidón de mandioca – 250 grs. De manteca blanda – 6 huevos – 50 grs. De coco rallado – 500 grs. De azúcar – 1 cucharada de polvo de hornear.
Procedimiento: batir los huevos con el azúcar a punto letra. Después  agregar la manteca blanda y el coco rallado hasta formar una pasta espumosa. Después incorporar el almidón de mandioca mezclado con el polvo de hornear. Trabajar hasta obtener una masa homogénea y blanda. Dejar reposar unos minutos y estirar la masa en un grosor de 1 cm., cortar con corta pasta del tamaño deseado. Hornear en horno moderado hasta que estén bien cocido pero no muy dorados.
Unir de a dos con dulce de leche y rodear con coco rallado.

El Guiso


El pensar que los argentinos descendemos de los barcos es una frase poco feliz que paso a ser parte de los mitos nacionales .es bueno recordar que nuestro territorio estaba habitado por pueblos con una gran riqueza y diversidad cultural. Con la llegada de los españoles el territorio estaba poblado con grupos indígenas que eran expresiones de las grandes culturas, del continente sudamericano.
Si dividimos el territorio por regiones en el NOA (Jujuy-Salta-Tucumán-Santiago del Estero -Catamarca) se habían asentado culturas andinas muy similares a las que habitaban territorio peruano.; además de las culturas Toba, Wichi y Guarani vinculadas al territorio del NEA (Formosa – Chaco –Corrientes –Misiones).
En la zona de la llanura estaba habitada por cazadores nómadas (Pampa y Patagonia), si nos referimos a esta ultima región nos encontramos con los canoeros magallánicos, tenían una vida adaptada al agua y al frío extremo.
Podemos decir que este abanico cultural era compuesto por agricultores sedentarios que vivían en grandes concentraciones urbanas, aldeas y que poseían una cosmovisión y arte altamente refinado, pero no se puede olvidar de esas poblaciones pequeñas y nómadas que tenían un estilo de vida adaptado para no quedarse en el lugar.
Cual era la población que habitaba en el territorio es muy difícil decirlo, debido a las epidemias y la Campaña del Desierto.
Quien fue un elemento de cambio estamos seguros de afirmar que fue el caballo, en America no existía y cuando el indígena logra incorporarlo a su vida cotidiana transforma su cultura, de ese momento histórico que las culturas pedestres se trasforman en ecuestres.
La cultura Pampa junto con las que estaban en la región Patagónica, tuvieron una relación muy estrecha con el caballo ya que pudieron dominar un territorio y a sus comunidades que contaban con organizaciones de Jefaturas importantes esto resulto una gran amenaza para la sociedad criolla.
Otro factor de cambio que ocurrió en la zona anteriormente nombrada es el encuentro entre Tehuelches y Mapuches estos últimos eran una población originaria de la época prehispánica , migraron hacia el este durante los siglos XVI –XVIII ,allí se encuentran con los Tehuelches que eran los dueños del territorio .
Este encuentro estuvo lleno de conflictos a pesar de este inconveniente nacen nuevos grupos étnicos como los Ranqueles.
El grupo Ranquel va a tener una acción destacada en la formación del Estado Nacional durante los siglos XVII-XVIII , con estos encuentros nacen otros grupos como los Pehuenches Querandíes.
.Como vemos la región pampeana era un guiso hecho dentro de una caldera étnica.
Las comunidades  anteriormente nombradas tenían una organización social y de jefaturas altamente organizadas .De allí el “crisol de razas” ya que la Toldería era una Babel humana , la habitaban grupos indígenas del lugar otros grupos étnicos ,además de refugiados políticos , gauchos , militares expulsados , afrodescendiente y europeos sin olvidar a los cautivos .
Este guiso multicultural era un problema para la hegemonía de la época no solo hablamos del poder económico, político sino también social  por lo tanto era necesario destruir.
La toldería indígena era un mundo especial con una estructura organizada aun así todos convivían, aquí no podemos hablar de fronteras sino de lugares de encuentro donde el intercambio de valores económicos sociales era importante para la cotidianidad.
Se necesita rescatar la figura del Gaucho no como vago mal intencionado sino como hombre que tenia una familia, tierras donde estaba su rancho.
Cuando aparece el ejercito reclutando gente para cubrir puestos en la milicia, el gaucho es quien pierde todo (familia, tierras y libertad) dado que no quería ir a la guerra, así que el único lugar que lo aceptaba era la toldería.
Los jefes de estos lugares eran los caciques que tenían un séquito multicultural, el cacique M. Rosas tenía un músico que era afrodescendiente y se dedicaba a tocar el acordeón. El cacique Baigorrita  muere junto a su mujer de origen francés.
Ahora bien cuando se pierde esta forma de sociedad?
1)      El caballo se incorpora a la vida del indio acorta distancias culturales y económicas , cosa que molesto a los grupos hegemónicos , ya no se quería compartir el territorios con ningún pueblo originario
2)      Esas tierras “Ociosas” debían ser colocadas en función del capitalismo de la época (Campaña del Desierto )
3)      J. A. Roca tenia la idea de nación pero sin el indio es uno de los tantos actores que se dedican aplanar la diferencia étnica, olvidando que los próceres de la independencia habían pensado un país con indígenas . Desde el punto de vista del “Otro” Baigorrita sostiene la idea de que hay lugar para todos, en medida de que los derechos sean respetados no entendían el porque de tanto ensañamiento. (el cacique Epumer es tomado prisionero cultivando su chacra).
Es posible que este guiso que ya lleva muchos años de cocción se pueda saborear siempre y cuando comencemos a reconocer la diferencia y respetar el derecho a la tierra. 

Cocina Palacio Real de Madrid

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